Día 12 El Espíritu Santo está utilizando su ayuno
• El Espíritu Santo está utilizando su ayuno para revelar su verdadero estado espiritual, dando como resultado quebrantamiento, arrepentimiento y una vida trasformada. Pídale a Dios ideas frescas en este ayuno.
• Dios busca por toda la tierra esos pocos fieles sobre los cuales puede derramar su bendición de maneras extraordinarias.
• Cuando usted ayuna, atrae la atención de El cómo alguien dispuesto a aventurarse por encima de las normas de la religión y entrar en los grandes desafíos.
• La raíz hebrea de sacrificarse es qadhash, que también es la raíz de la palabra santo. Dios dijo: “ yo soy el señor tu Dios ”así que santifíquense y manténganse santos, porque yo soy santo” (Levítico 11:44). La santificación es el proceso de llegar a hacer santos en la vida cotidiana; es practicar la pureza y ser apartado del mundo y del pecado.
• La santificación es permitir al Espíritu Santo que nos haga más semejantes a Jesús en lo que hacemos, en lo que pensamos, y en lo que deseamos.
• Israel experimentó en carne propia lo que es tratar de conquistar estando contaminado. En Josué 7 se enfrentó contra el diminuto ejército de Hai después de que Israel hubiera pecado al haber robado y ocultado cosas en medio de ellos y sufrió una fea derrota.
• Esa historia nos habla ahora a nosotros y nos debe quedar claro que para conquistar nuestros grandes desafíos debemos estar puros delante de Dios.
• La santificación es la clave de estar en la voluntad de Dios. Como dijo Pablo: “pues es la voluntad de Dios es nuestra santificación” (1 Tesalonicenses 4:3).
• No hay necesidad de intentar descubrir alguna misteriosa “rueda de Dios”. No puede usted seguir la guía de Dios hasta que comience donde Pablo dijo que comenzara.
No son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad. Como tú me enviaste al mundo, así yo los he enviado al mundo. Y por ellos yo me santifico a mí mismo, para que también ellos sean santificados en la verdad. (Juan 17:16-19).
• El ayuno le ayudará a identificar áreas de pecado oculto y cosas que son desagradables a Dios en su vida. El ayuno le ayuda a discernir entre servir a la carne y servir al espíritu. “porque si la sangre de los toros y de los machos cabríos, y las cenizas de la becerra rociadas a los inmundos, santifican para la purificación de la carne, ¿Cuánto más la sangre de Cristo, el cual mediante el Espíritu Eterno se ofreció a sí mismo sin mancha a Dios, limpiará nuestras conciencia de obras muertas para que sirváis al Dios vivo?” (Hebreos 9:13-14).
• Si estamos en Cristo, su sangre nos limpia de obras muertas, capacitándonos para servir a Dios en santidad.
• El ayuno le ayuda a distinguir entre lo que usted quiere y lo que reamente necesita. Cuando decide no preocuparse por esas cosas y buscarle a Él primeramente, está demostrando el tipo de fe que agrada a Dios, porque está confiando en que Él también le dará todas las cosas que usted necesita.
En su duodécimo día de ayuno, recuerde:
• Anote sus pensamientos diarios.
• Continúe enfocándose en Dios y en sus desafíos.
• El hambre sigue siendo un problema, pero permanezca enfocado.
Pensamiento para su meditación o su diario:
• ¿Qué le ha revelado Dios a usted personalmente?
• ¿Qué batallas ve desde ya ganadas producto de este sacrificio?
• Reflexione en lo que significa presentar su cuerpo como sacrificio vivo mediante su período de ayuno.
• Dios busca por toda la tierra esos pocos fieles sobre los cuales puede derramar su bendición de maneras extraordinarias.
• Cuando usted ayuna, atrae la atención de El cómo alguien dispuesto a aventurarse por encima de las normas de la religión y entrar en los grandes desafíos.
• La raíz hebrea de sacrificarse es qadhash, que también es la raíz de la palabra santo. Dios dijo: “ yo soy el señor tu Dios ”así que santifíquense y manténganse santos, porque yo soy santo” (Levítico 11:44). La santificación es el proceso de llegar a hacer santos en la vida cotidiana; es practicar la pureza y ser apartado del mundo y del pecado.
• La santificación es permitir al Espíritu Santo que nos haga más semejantes a Jesús en lo que hacemos, en lo que pensamos, y en lo que deseamos.
• Israel experimentó en carne propia lo que es tratar de conquistar estando contaminado. En Josué 7 se enfrentó contra el diminuto ejército de Hai después de que Israel hubiera pecado al haber robado y ocultado cosas en medio de ellos y sufrió una fea derrota.
• Esa historia nos habla ahora a nosotros y nos debe quedar claro que para conquistar nuestros grandes desafíos debemos estar puros delante de Dios.
• La santificación es la clave de estar en la voluntad de Dios. Como dijo Pablo: “pues es la voluntad de Dios es nuestra santificación” (1 Tesalonicenses 4:3).
• No hay necesidad de intentar descubrir alguna misteriosa “rueda de Dios”. No puede usted seguir la guía de Dios hasta que comience donde Pablo dijo que comenzara.
No son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad. Como tú me enviaste al mundo, así yo los he enviado al mundo. Y por ellos yo me santifico a mí mismo, para que también ellos sean santificados en la verdad. (Juan 17:16-19).
• El ayuno le ayudará a identificar áreas de pecado oculto y cosas que son desagradables a Dios en su vida. El ayuno le ayuda a discernir entre servir a la carne y servir al espíritu. “porque si la sangre de los toros y de los machos cabríos, y las cenizas de la becerra rociadas a los inmundos, santifican para la purificación de la carne, ¿Cuánto más la sangre de Cristo, el cual mediante el Espíritu Eterno se ofreció a sí mismo sin mancha a Dios, limpiará nuestras conciencia de obras muertas para que sirváis al Dios vivo?” (Hebreos 9:13-14).
• Si estamos en Cristo, su sangre nos limpia de obras muertas, capacitándonos para servir a Dios en santidad.
• El ayuno le ayuda a distinguir entre lo que usted quiere y lo que reamente necesita. Cuando decide no preocuparse por esas cosas y buscarle a Él primeramente, está demostrando el tipo de fe que agrada a Dios, porque está confiando en que Él también le dará todas las cosas que usted necesita.
En su duodécimo día de ayuno, recuerde:
• Anote sus pensamientos diarios.
• Continúe enfocándose en Dios y en sus desafíos.
• El hambre sigue siendo un problema, pero permanezca enfocado.
Pensamiento para su meditación o su diario:
• ¿Qué le ha revelado Dios a usted personalmente?
• ¿Qué batallas ve desde ya ganadas producto de este sacrificio?
• Reflexione en lo que significa presentar su cuerpo como sacrificio vivo mediante su período de ayuno.
_____________________________________________________________________________
_____________________________________________________________________________
_____________________________________________________________________________
Enfoque de oración del día 12: Relaciones correctas y ensanchar el Reino.
• Las personas pueden ser utilizadas en nuestras vidas como bendiciones de Dios o como herramientas del enemigo.
• Usted tiene que ser capaz de “discernir” la diferencia entre los dos. Están las “personas carnales” que le derriban, pero están las “personas de fe” que le edifican y ayudan a despertar su potencial.
• Las “personas espirituales” que le edifican y ayudan a destapar su potencial.
Las “personas carnales” alimentan su temor y hacen que se sienta como si hubiera perdido su sueño.
• Las “relaciones correctas” comienzan a infundir en usted una actitud que dice: “puedo hacerlo”
• Puede ser “catapultado” por las relaciones que Dios pone en su vida. Por tanto, a medida que continúe el ayuno y le busca a El hoy, busque su consejo sobre las relaciones que hay en su vida. ¿Cuáles son agotadoras? ¿Cuáles le apoyan?
_____________________________________________________________________________
_____________________________________________________________________________
_____________________________________________________________________________
Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen.
(Juan 10:27)
Comentarios
Publicar un comentario